30 de marzo de 2011

Cuento corto

Lorenzo se iba de la casa de Teresita con la sensación de que algo faltaba, aunque según ellos terminaron de buena manera quedando como amigos y hasta con regalo de despedida, Lorenzo no dejaba de pensar que su vida amorosa no era más que una sátira de la vida de Michael Scott, llena de desilusiones y corazones rotos.

Mientras este curioso personaje prendía un cigarro se daba cuenta que esos cuatro años que vivieron juntos fueron los mejores que había tenido, que conforme pasaba el tiempo las partes más oscuras brillaban como nunca, fue en ese momento que se dio cuenta que algo le faltaba.

Cuando estaba llegando a su pequeño departamento se encontró con Ricardo, un viejo amigo que lo conocía como nadie mas y que al ver su cara desecha sabía exactamente qué pasaba. Lo único que le dijo este fue -existen muchos más peces en el mar, pero como mi padre solía decir “Si quieres atrapar a tu ballena blanca, la dinamita es la mejor carnada”. Lorenzo sonrió al escuchar el comentario de su amigo y siguió caminando.

Pasaron los años y estos amigos se volvieron a juntar, Lorenzo con una sonrisa de oreja a oreja le agradeció por el consejo que le dio hace tantos años atrás y le dijo “si los pescadores usan dinamita cuando no hay otra salida, yo decidí proponerle matrimonio”.


(tenia que escribir una historia para un trabajo de la u)
(los nombres no tienen nada que ver con macanudo)
(mentira)

No hay comentarios:

Publicar un comentario